SORRAVENTURAS

A apenas dos días de despedir este 2008, como es menester, haré mi balance personal del año. Este año podría definirlo como "el año tranquilo" en el mejor de los sentidos. Por una parte es cierto que en algunos aspectos (trabajo, salir...) digamos que me he acomodado un poquillo; pero esta es una de esas ocasiones en las que, como diría Jorge: "Sin noticias, buenas noticias".
No tengo nada de lo que quejarme porque en el día a día las cosas han seguido su curso normal y digamos que he dado el paso lógico en las cosas en las que debía darlo. Además, en la mejor de las compañías, tanto por amigos, como por la persona que está conmigo a cada momento y con la cual ya he consolidado aún más si cabe eso tan especial que hay entre nosotros. Pero bueno, no me pondré pasteloso, que luego me tiráis piedras (aunque si yo hablara... jaja).
Bueno sí que tengo de lo que quejarme. De que el PSOE haya ganado las elecciones ¬¬. Putos sociatas...
De todas formas este año sí que ha tenido momentos especiales. Digamos que esta es la primera vez que me he ido de vacaciones con mis colegas y nos lo pasamos muy; pero que muy bien... y he tenido otros momentos que prefiero reservarme.
En realidad, no hay nada más que contar. Sólo desear que el 2009 siga por lo menos en la estela de este 2008 y que los grandes proyectos que tengo pensados se vayan haciendo realidad poquito a poco en compañía de mi gente. No me propongo ningún propósito especial para este nuevo año porque como soy gafe, basta que lo diga para que no se cumpla, jajaja.

A los que leáis esto, feliz entrada y salida de año y todas esas cosas que se desean. Lo que yo deseaba viene mañana a eso de las diez.